domingo, 28 de diciembre de 2014

El sueño y la situación traumática - Ángel Garma


"Hay un fenómeno extraño en relación a la teoría de los sueños: es la frecuencia con que la satisfacción instintiva es poco intensa, el sueño suele ser cobarde en la realización de la satisfacción de deseos. ¿Por qué no se atreve el sueño a presentar una plena satisfacción de deseos?. Pienso que esto es debido a que la satisfacción mas o menos intensa de deseos que ocurre en los sueños encubre situaciones desagradables a las que el sujeto se halla sometido y que forman la verdadera base del sueño. En el origen de todos los sueños suele hallarse una situación desagradable para el sujeto, que el sueño intenta corregir. Me parece que el término más adecuado para referirnos a ella es el de situación traumática, esto es, aquella situación que ocasiona en poco tiempo una intensidad tan grande de excitaciones psíquicas que el sujeto no puede liberarse de ellas o elaborarlas adecuadamente. Son estas las características de la situación desagradable que constituye el origen de los sueños. La situación traumática que forma la base del contenido latente es transformada en el contenido manifiesto en una situación agradable o al menos en una situación menos desagradable o indiferente. El deseo que se satisface no es sino simplemente un intento de disminución del desagrado psíquico originado por la fijación a la situación traumática".

"Como cualquier otro síntoma neurótico el sueño es consecuencia de conflictos psíquicos más que simplemente de deseos que buscan su satisfacción. El origen de los sueños esta constituido por los conflictos inconscientes entre contenidos del ello, del superyo y el mundo externo, que el yo no pude solucionar conveniéntemente por lo que configuran para él situaciones traumáticas. Es característico del sueño que el yo sea incapaz de resolverlos, esto le lleva a recurrir a soluciones ficticias. Puede decirse que todo sueño tiene dos componentes distintos el primero es la situación conflictiva ineludible y por lo tanto traumática y el segundo es la solución ficticia que solo en apariencia alivia las tensiones psíquicas, estos dos componentes se pueden entremezclar y alguno de ellos puede no estar representado en el contenido manifiesto del sueño. Podemos afirmar que el sueño es una dramatización enmascaradora de conflictos inconscientes traumáticos y de sus soluciones ficticias. Solamente las conflictos importantes de los cuales el individuo no puede escapar y a los que tampoco logra encontrarles una solución son capaces de originar sueños. La situación conflictiva inconsciente generadora del sueño suele ser desencadenada por un conflicto actual. El conflicto actual adquiere su importancia por ser el exponente de otros conflictos más antiguos, aquellos conflictos inconscientes crearon el conflicto actual que a su vez reactivó aquellos. Esta yuxtaposición de los conflictos actuales y pasados condensados se dramatiza en el sueño a través de los detalles de los restos diurnos".




Angel Garma fue autor de numerosas obras psicoanalíticas, siendo la primera en ver la luz “El Psicoanálisis, la neurosis y la sociedad”, editada en Madrid en 1936. Mas tarde, “El Psicoanálisis de los sueños” que presentó en Buenos Aires como tesis doctoral y publicó como libro en 1940 y conoció varias reediciones. Siguieron otras muchas obras, como El psicoanálisis, presente y perspectivas (1942); Psicoanálisis de las guerras (1942); Sadismo y masoquismo en la conducta (1945); La realidad exterior y los instintos en la esquizofrenia; Génesis psicosomática y tratamiento de úlceras gástricas y duodenales (Buenos Aires, 1975), El psicoanálisis: teoría, clínica y técnica (1976); Génesis y contenido primario de la alucinación onírica; y Nuevas aportaciones al psicoanálisis de los sueños, editada en 1970, entre otras.

No hay comentarios:

Publicar un comentario